sábado, 29 de septiembre de 2012

No hay nada que hacer.

Hablo conmigo misma, veo mi pasado. Solo veo fallos y errores. Sigo sintiéndome tan sola como entonces, como cuando nadie estaba allí para frenar mis pensamientos. Recuerdo que perdí mi cabeza por tonterías, que caí demasiado bajo por creer mentiras. Puedo verme ahora, sentada en una esquina a oscuras, con las rodillas cerca del pecho para hacerme pequeña, balanceándome para no llorar, que sigo igual de perdida que antes. Por más que intente superar ésto nunca podré y que lo peor aún está por venir.
Todos esperan mi caída, también yo, pero esta vez aguantaré más, solo para demostrar que ahora soy un poco más fuerte.
Puede que me rinda, pero antes habré luchado.

miércoles, 5 de septiembre de 2012

Tengo miedo.

Tengo miedo de que ese día llegue, el día en que te pierda para siempre.
Tengo miedo que un mañana, cuando despierte ya no estés.
Tengo miedo de que en un futuro solo te pueda ver en fotografías y en mis recuerdos.
Tengo miedo de que un día de estos ya no te pueda abrazar.
Deseo con todas mis fuerzas no vivir esos días sin ti, porque estaré sola en un mundo de locos. No te tendré a ti, esa persona que siempre que me veía me abrazaba y me sonreía sin esperar nada a cambio.
Pero no quiero rendirme cuando tu no estés, porque tu no querrías eso, pero lo veo tan difícil... Veo tan difícil tener que vivir en un mundo sin ti...
Tengo miedo del mañana. Tengo miedo de una llamada. Tengo miedo del cáncer. Tengo miedo de la muerte. Tengo miedo de un corazón que pueda dejar de latir. Tengo miedo de no despedirme. Tengo miedo de que no sepas como te quiero. Tengo miedo de no poder afrontarlo. Tengo miedo de perderme.
Tengo miedo de no saber el porqué de las cosas, y sobretodo de esta.

lunes, 3 de septiembre de 2012

La primera palabra de esta página.

Tú.
Hablaremos de la primera palabra de esta primera página de esta pequeña historia.
Tú, que no sé quien eres, que estás leyendo esto, quiero decirte algo.
Aunque no sé ni como es tu carácter ni tu físico, eres alguien perfecto. Por más que la gente diga lo contrario, por más que tu cerebro diga lo contrario, eres una persona perfecta. No importa lo que dice el espejo, no importa nada que no sean bonitas palabras.
Sé que todos tenemos defectos y virtudes, pero ellos son los que nos hacen ser quienes somos. Envidiamos a esa gente que parece perfecta, pero, ¿crees que esa gente piensa eso? Es igual que tú, esa gente también te envidia a ti.
Así que sonríe, acéptate, y aunque sea difícil, quiérete.